sábado, 5 de febrero de 2011

EL REVERSO TENEBROSO DE MI SUEGRA

Mi querida suegra es la mujer con más elegancia natural que conozco, se mueve como quien baila ballet, no levanta jamás la voz y nunca, lo juro, nunca, la he oído hablar mal de nadie, pero estas virtudes lógicamente deben ir acompañadas de un reverso tenebroso como el yin y el yan, reverso que necesariamente se traduce en algún fallo pues en definitiva no todo puede ser tan perfecto y efectivamente lo tiene.
La pobre no ve tres en un burro, pero no piensen que es por falta de visión (es miope operada) es simplemente porque no mira...si, no mira, fija los ojos en los objetos o las personas pero sorprendentemente no los ve o no los identifica (aunque el oftalmólogo nos haya asegurado que ve perfectamente) y no crean que padece algún tipo de enfermedad mental es que tiene la mala costumbre de mirar siempre al infinito y por eso no ve ni moco que diría el castizo.
Esta particularidad ha dado lugar a jugosas anécdotas que son la comidilla de la familia en cualquier reunión...¿te acuerdas de aquella vez que mamá se cruzó con el tío  Faustino (su hermano) en el ascensor? ¡jo, que bueno! dice mi cuñado al borde de las lágrimas, no de pena sino de risa.
Faustino acudió a casa de su otra hermana y al entrar en el ascensor le increpan "espere por favor" era su hermana Marujita desde el zaguán. El que la conoce muy bien (no en vano es todaunavidajuntos) observó inmediatamente que no le había reconocido, insisto por ese defecto que tiene Marujita de mirar sin ver, y socarrón como es, cuando aquella entra en el ascensor le espeta un simple "buenassss" que no permita reconocerle. Marujita tan digna y tan elegante mirando los botones o lo que sea que ella vea, dice "¿A que piso va? Faustino casi al borde del infarto de la risa "al cuarto ¿y ud.?" uyyy que casualidad yo voy al mismo....imagínense la sorpresa de la pobre mujer cuando el desconocido llama a la puerta de casa de su hermana....en fin el cachondeo todavía reverbera en la escalera de la finca como un poltergeist.
Conocedor de esta especial característica de su consuegra, mi padre que también era bastante socarrón, siempre jugaba a hacerse el despistado cuando se la cruzaba por la calle y jamás, jamás le vio...hoy en día mi churri, hace el mismo juego con su madre y juro que tampoco le ve.
Pero es que además de no mirar tiene la mala costumbre de deshacerse de todo aquello que está en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Me explico, Marujita es una maniática del orden todo debe estar en su sitio y nada debe sobresalir. Esta manía, porque es manía, hace desaparecer todas tus cosas hasta el punto que en ocasiones tienes que jugar a la ouija para encontrar tu bolso que dejaste encima de la mesita; pues bien, esta obsesión le ha traído algún que otro disgusto y ha estado a punto de darnos más.
Marujita, obtiene rentas de un pequeño apartamento que suele alquilar a altos ejecutivos de paso por la ciudad a los cuales mima en exceso pues en ello le van los garbanzos. Un día se encontraba con la tatadetodalavidadedios en el apartamentito limpiándolo para el superejectutivo estupendo que lo tenía de arrendado cuando un montón de papelitos, decenas de ellos, llamaron poderosamente su atención como un faro en medio de la tormenta (tiene una sensibilidad especial para ver las cosas que están fuera de su sitio, no le pasa lo mismo con sus hermanos) ¡como, unos papeles encima de la mesa de centro y ahí abandonados a su suerte! ¡esto no puede ser, que desastre! y ni corta ni perezosa rompió en mil pedazos los dichosos papelitos y se fue tan contenta a su casa con su deber de limpieza cumplido.
Por la noche recibimos una llamada desesperada "hijo no sabes lo que me ha pasado...estoy desquiciada y no se que hacer" y acto seguido le explica como rompió aquellos papelitos tan molestos del inquilino superejecutivo y como la mala fortuna quiso que aquellos papelitos fueran los justificantes de los gastos de los tres últimos meses, con viajes al extranjero, comidas, gastos de representación...etc, en definitiva la bromita subía a unos mil euros de vellón que obvio es decirlo, Marujita se vió obligada a pagar al buen hombre, pues o los pagaba ella o él y él, aunque muy bien intencionado y educado, no tuvo duda sobre quien debía apoquinar.
Que odia los papelitos lo manifestó en otra ocasión en que habiendo dejado yo encima de la mesa del televisor un cheque con mi firma para hacer unos pagos importantes, al volver de hacer un pis (hago este inciso un poco ordinario para que observen el poco tiempo que pasó entre una cosa y otra) me encontré con el cheque roto en mil pedazos en el cenicero....¡¡¡¡socorro!!! ¿que ha pasado aquí? Teniendo en cuenta que entonces todavía no había nacido ningún niño mis sospechas recayeron inmediatamente en Marujita...pero ¿que has hecho? "chica,chica (ella dice mucho eso de chica) yo he visto un papel y lo he roto porque, explícame ¿que hacía ahí ese papel? .....pero ¿no te das cuenta que podría haber sido un talón a mi favor, es decir dinerito contante y sonante ganado con el sudor de mi frente? ¿que podría haber hecho? ¿te das cuenta de hasta donde te lleva tu obsesión?   yo un poco borde, todo hay que decirlo, le hice creer durante unos minutos que era un cheque que habían librado a mi favor...pobre mujer, aunque creo que esto y lo del ejecutivo le ha servido para mirar más lo que tiene tentaciones de romper o bien preguntar al interesado antes de...
Pese a todo ella sigue con sus manías y su permanente falta de visión....y su encanto y por supuesto unas enormes ganas de vivir que le hacen recorrerse media península ibérica todos los años, parte de Europa y si cae América también a sus ochenta años y sigue guapísima.
Más adelante seguiré contándoles historias de mi suegra porque vale la pena conocer, entre otras, como se fueron ella y su amiga a Londres sin saber hablar inglés y sin ver....

4 comentarios:

  1. Ay Marisa que me parto con Marujita!!!!!
    Por favor, no te olvides de la del chorizo en la ensalada, la de la compañera de mi pequeño ruiseñor, gorda como una tudesca, le pregunto que si ya habia salido de cuentas, ja ja . Si me acuerdo de más te las paso....

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  3. Muy buena la historia, lo que yo no sabia es lo de la mania del orden, desde luego dedicarse a romper papeles a la ligera sin ver nada es peligrosisimo.
    Tambien puedes contar historias sobre las hermanas de Marujita...
    Saludos y sigue.

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  4. Estas historias de Marujita y sus hermanas me recuerdan el viaje que hicimos mi hermana mi madre y yo a Berlin con Marujita, la hermana V de Marujita que ve menos aun que ella, la hermana C de Marujita y la señora T vecina del pueblo de Marujita. La señora T con casi 80 años a la sazon es un poco cojita.
    Espectacular.

    Para empezar si quedabas a las 1000 en su hotel pijo del centro, cuando llegabas aun estaban sin arreglar, textualmente medio en pelotas, pero ellas tan felices. Al final empezabas a ver cosas a las 1200 (hora alemana de comer).

    Luego se iban perdiendo por cada esquina (como no ven...) a la que te descuidabas un momento te faltaban V o Manolita u otra, menos mal que ibamos al paso de la cojita. Al final ibamos en formacion militar, yo al frente con el plano, mi hermana en la retaguardia y todos enlazados por los moviles. Pues aun asi se nos despistaron varias veces, por no mencionar que V, Marujita y C se paraban cada cinco minutos para charlar sobre la familia, el pueblo, el tiempo, la cosecha de aceituna, las fiestas de moros y cristianos,... increible.

    Por cierto vaya negocio debio hacer Telefonica moviles. Desde donde estuvieramos tenian que llamar continuamente a Cuchicuchi, al churri y a toda la parentela (que no es pequeña). Eso si que es una familia unida, ese verano subieron las matildes (acciones de TElefonica).

    En fin un viaje inolvidable. De verdad que pesea a todo lo pasamos muy bien.

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